Hacía calor y sol, el sol no permitía que la gente fuera a trabajar y comprar fácilmente. Era al mediodía y la mayoría del pueblo descansaba y comía bajo el techo de la casa y la mezquita. Hacía suave viento que acariciaba como siempre los rostros de la gente de Medina.

Algunos de sus amigos vieron al Imam de lejos sentado a la sombra de una palmera. Cuando se acercaron a él, vieron un perro sentado a su lado. El Imam comía un bocadillo y tambien le daba un pedazo del bolcadillo al perro. Sus amigos se sorprendieron y dijeron: "Oh, hijo del Mensajero de Dios, déjanos quitarte a este perro para que no te moleste al comer. Tanto tu comida es poca como este perro callejero está muy sucio".

El Imam Hasan (P) prohibió a sus amigos que hagan esa acción y dijo: “Dejenlo; me avergonzaré ante Dios si una criatura me ve comiendo y no le doy de mi comida".

Fue la primera vez que los amigos de Imam vieron a una persona que no queria comer ni siquiera frente a un animal o de verlo comer con pena.

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El pobre hombre, cansado y sudoroso, buscaba un pedazo de pan para comer en la ciudad. Preguntó a todos la dirección de la persona más generosa de la ciudad y le presentaron al Imam Hasan (P). Al fin todo cansado encontró al Imam Hasan (P) y se paró frente a él diciendole:

"¡Oh, hijo del príncipe de los creyentes¡ Ayúdame contra el tirano que ni respeta a los ancianos ni se apiada a los niños!

Imam Hasan (P) le preguntó: "¿Dime quién es este enemigo para que pueda ayudarte?"

El hombre dijo: "¡La pobreza!"

El Imam ordenó a su criado que trajera todo el dinero que hubiera en la casa, entonces le dio todo el dinero que se encontro en ese momento al pobre y le dijo: "¡Te juro que cuando tu enemigo vuelva otra vez, vendrás a mí para que nuevamnete te alejé a este enemigo!"

Los amigos del Imam estaban sorprendidos por toda la generosidad del Imam; sabían que era tantas veces que el Imam Hasan (P) compartía toda su riqueza con un pobre...

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El sonido de espadas chocando no se detuvo ni por un momento; el sol ardiente de Iraq había disminuido la potencia de los soldados en ambos lados de la guerra. Había una dura guerra; por la razón que un grupo no estaba satisfecho de la justicia del Imam Ali (P) en cuanto a la división de la propiedad del gobierno y quería más.

El Imam Ali (P) encargó a uno de sus hijos, Muhammad Hanafiya, que terminara la guerra atacando al centro del ejército enemigo, pero Muhammad Hanafiya por el miedo no pudo hacer nada. Esta vez le tocó el turno a Hassan, el nieto del Mensajero de Dios (P), de prevenir la injusticia en el gobierno islámico poniendo fin a la guerra. Al fin, Hasan, este joven amable y valiente joven, atacó al corazón del ejército de enemigo y muy pronto con ingenio y fuerza tuvo éxito terminando por completo la guerra rápidamente.

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Se dice que sí, una persona perfecta es alguien como el Imam Hasan Muytaba (P); una persona valiente tendra bondad, sera compasivo y amable con los humanos y los animales, y se mantendra fuerte y estable contra el enemigo que intente generar inseguridad, caos e injusticia. El Imam Hasan (P) es un personaje a seguir para jóvenes hasta nuestros dias.