publicado el: 25 julio 2023 - 07:37

Especial Segundo Paso

El Pueblo Indígena Ayoreo

Conociendo a los Pueblos de América Latina
El Pueblo Indígena Ayoreo

Segundopaso - El Pueblo Ayoreo es una antigua y valiosa comunidad indígena que habita las vastas y exuberantes selvas del Gran Chaco, una región compartida por Paraguay, Bolivia y Argentina. Con una historia que se remonta a miles de años atrás, los Ayoreo han sabido mantener sus tradiciones y modo de vida en armonía con la naturaleza a pesar de los desafíos modernos que enfrentan.

Historia

El grupo étnico ayoreo fue tradicionalmente un pueblo de cazadores recolectores semi-nómadas que poblaban el Chaco Boreal. En el siglo XVIII los jesuitas fundaron la reducción de San Ignacio de Zamucos (1724-1745), que finalmente fue abandonada, a diferencia de otras reducciones de Chiquitos, donde unos grupos permanecieron siendo absorbidos por los chiquitanos y otros regresaron a los bosques. El pueblo ayoreo se mantuvo aislado hasta la década de 1930, cuando suceden una serie de irrupciones en su territorio, como ser la Guerra del Chaco (1932-1935), exploraciones petroleras, la ocupación del Chaco paraguayo por colonias menonitas y la construcción del ferrocarril Santa Cruz de la Sierra-Corumbá (1939-1955). Todo aquello provocó que los ayoreos decidan salir de su hábitat tradicional para entrar en contacto con la sociedad nacional. Es así que a partir del año 1949 se fundaron estaciones misionales y comunidades ayoreas, principalmente a lo largo de la vía férrea.

En 1955 llegaron los primeros ayoreos la ciudad de Santa Cruz de la Sierra en búsqueda de trabajo, servicios de salud y nuevos horizontes. En Bolivia existen grupos no contactados de ayoreos en el Parque Nacional Kaa Iya.

Religión y cosmovisión

Los ayoreos extienden su relación clánica al mundo que les rodea, donde cada especie animal, objeto o fenómeno natural pertenece a alguno de los siete clanes. Conciben su historia como dividida en dos grandes etapas. El primer periodo es la época de los antepasados, de los jnani’bajade. El segundo, es el periodo actual de los ayorei disi ejode o de los ayoreos de la nueva generación. La fiesta del pájaro cuyabo o asojná representó la única fiesta grande y periódica de este pueblo y marcaba el tránsito de la época seca a la lluviosa.

Organización social y política

Tradicionalmente la etnia ayorea estaba compuesta por diversos grupos locales, que poseían su propio nombre, liderazgo y territorio. Cada grupo local o gagué poseía varios jefes llamados decasuté. El clan sigue vigente hasta hoy, siendo patrilineal (los hijos pertenecen al clan del padre) y exógamo (una persona debe casarse con una pareja de otro clan). Existen siete clanes en los que sus integrantes descienden de un antepasado mítico común que heredan del padre. Actualmente se mantiene la familia extensa matrilocal (la nueva pareja vive en casa de los padres de la esposa) o jogasui.

Economía

Actualmente la principal actividad es la agricultura (maíz, yuca, plátano y zapallo), complementada con la cacería (hombres) y recolección de frutos y tubérculos (mujeres), así como la crianza de animales menores. Es tradicional la producción artesanal y venta de bolsos, collares y otros accesorios de vistosos diseños elaborados con fibra de garabatá (Bromelia hieronymi), mientras que los varones se emplean como peones estacionales en el sector agropecuario y el aprovechamiento forestal comunal en algunas TIOCs.

Este pueblo indígena se destaca por su profundo conocimiento y conexión con la tierra que los rodea. Su existencia se fundamenta en la caza, la recolección y la agricultura. A través de generaciones, han perfeccionado técnicas para cazar y recolectar alimentos, utilizando arcos y flechas con precisión y conocimiento de los ciclos naturales para determinar los mejores momentos para sus actividades.

Sin embargo, a lo largo del tiempo, los Ayoreo se han enfrentado a numerosas amenazas. La colonización, la expansión agrícola y la deforestación han disminuido drásticamente sus territorios ancestrales, presionando sus comunidades y alterando su forma de vida tradicional. El contacto con la sociedad no indígena también ha traído enfermedades y conflictos culturales que han puesto en peligro su identidad y supervivencia.

A pesar de estas dificultades, los Ayoreo han demostrado una resistencia y perseverancia inquebrantables. Han organizado luchas y movimientos para proteger sus territorios y derechos, buscando conservar su patrimonio cultural y medio ambiente. La lucha por la demarcación de sus tierras ha sido uno de los aspectos cruciales de su resistencia, con el objetivo de salvaguardar su modo de vida tradicional y la diversidad biológica de su hogar.

La cosmovisión de los Ayoreo se basa en una profunda reverencia por la naturaleza y la espiritualidad. Creen en la existencia de seres sobrenaturales y en una relación cercana con los elementos naturales. La música, danza y artesanía forman parte intrínseca de sus ceremonias y celebraciones, donde expresan su gratitud y respeto a la Madre Tierra.

Recientemente, organizaciones y gobiernos han tomado medidas para proteger los derechos de los Ayoreo y apoyar sus luchas. Se han implementado programas de educación intercultural que preserven su lengua y tradiciones, mientras se brindan oportunidades para acceder a servicios básicos y mejores condiciones de vida.

El pueblo Ayoreo continúa inspirando con su profunda sabiduría y su amor por la tierra. Su resistencia frente a la adversidad y su valiosa contribución a la conservación de la biodiversidad son un recordatorio de la importancia de proteger y valorar las culturas indígenas y su relación milenaria con la naturaleza.

Código para noticias 3159

etiquetas

Su comentario

Usted está respondiendo
Indicio de comentario
5 + 1 =